Los valores democráticos en Brasil: la bibliografía y el escenario actual
Análisis acerca del desarrollo de la estructura y cultura política brasileña y el escenario actual.
El análisis acerca del desarollo de la estructura y de la cultura política brasileña constituye un importante área de investigación de la Ciencia Política en el país, pues contribuye para la comprensión de la trayectoria de la política del mismo; autores importantes como Sergio Buarque de Holanda (2007), Raymundo Faoro (2001) y José Álvaro Moisés (1995) ofrecieron aportes a este campo de estudio. Considerando las bases teóricas de tales estudios, este artículo tiene como objetivo discutir la siguiente cuestión: ¿Cuál es la compatibilidad entre la cultura política brasileña señalada por la bibliografía y los resultados de las encuestas de opinión pública actuales? Con el fin responder a esta cuestión, serán analizados – en diálogo con la literatura mencionada – datos del survey Latinobarómetro entre los años de 1994 y 2010 referentes a esta temática, a saber, la percepción de los brasileños en relación a la confianza en las instituciones democráticas, la satisfacción con la democracia, el apoyo al régimen y la forma como los políticos actúan, si de acuerdo con intereses particulares o mirando al bienestar de la mayoría.
Lo que dice la literatura sobre el caso brasileño
Se sabe que Brasil, por su diseño constitucional, es un Estado democrático en lo que se refiere a los requisitos de participación y competencia, conforme los parámetros establecidos por Dahl (1997). Sin embargo, autores clásicos como Sergio Buarque de Holanda (2007) y Raymundo Faoro (2001), argumentan que la tradición sociocultural del país es un factor de grande influencia en la organización social actual y en el mismo sistema político contemporáneo. Para ambos autores, tal “herencia cultural” determina fuertemente el comportamiento y la forma como los brasileños se organizan. Estos teóricos describen el cuadro político brasileño como un Estado en el cual las relaciones personales tienen más valor que las leyes, incorporando valores privados al espacio público. En este panorama, el poder económico y político se centralizan en una elite antidemocrática, generando una cultura política personalista y una ciudadanía casi ausente. Siguiendo esa dirección, al analizar el periodo de transición, José Álvaro Moisés (1995) afirma que lo mismo ocurrió bajo acuerdos políticos, manteniendo elites autoritarias y conservadoras en las principales esferas de toma de decisiones. Así, partiendo de esta breve revisión es posible analizar los datos de percepción y averiguar si ocurrió algún cambio en el patrón de la cultura política democrática de los brasileños descrito por los referidos autores.
Análisis de datos
Partiendo de las consideraciones hechas acerca de la bibliografía, serán analizados datos pertinentes a la comprensión de la actual cultura política de Brasil. El primer gráfico se refiere a la preferencia, o no, de las personas por la democracia, por encima de cualquier otra forma de gobierno.
Gráfico 1: “Apoyo a la democracia” (%)
Fuente: Latinobarómetro
En este gráfico, podemos observar dos resultados problemáticos, pero no tan alarmantes. El número de personas que optan por la democracia corresponde, en general, a menos de la mitad de los entrevistados. Además, si son sumadas las cantidades de individuos que afirman que “en algunas circunstancias un gobierno autoritario puede ser preferible” y que el régimen no hace diferencia, es posible notar índices que se mantienen encima de 30%, y se sobreponen a los “demócratas” en una significativa parte del periodo. El Gráfico 2 presenta los índices de satisfacción con la democracia, con el fin de mensurar la forma como la población la evalua en la práctica.
Gráfico 2: “Satisfacción con la democracia” (%)
Fuente: Latinobarómetro
En este gráfico, se observa que la democracia brasileña, aunque esté consolidada del punto de vista institucional, no posee la aprobación de su funcionamiento en la práctica por la mayor parte de los entrevistados (a la excepción de 2009 y 2010). Dentro de esta temática, el Gráfico 3 permite mensurar la percepción de las personas en lo que se refiere a la forma como los políticos actúan, si de acuerdo con intereses particulares o mirando el bienestar de la mayoría.
Gráfico 3: “Las decisiones del gobierno buscan privilegiar solamente a algunos?” (%)
Fuente: Latinobarómetro
Antes de analizar el resultado, es importante subrayar que el banco de datos del Latinobarómetro solamente disponía de informaciones para esa pregunta en los años de 2002 y 2010; sin embargo, como ese recorte abarca un intervalo bastante largo y contempla un punto importante de la teoría de Faoro (2001), se decidió mantenerlo en el análisis. El valor en relación a las personas que concuerdan con la afirmación es alto (sempre encima de 65%). Niveles como estes indican que la mayoría de la población cree que existe la permanencia de una elite que tiene sus intereses representados de manera privilegiada. Mediante tal situación, se analiza la cuestión de la existencia o no de confianza en el gobierno a lo largo del tiempo.
Gráfico 4: “Confianza en el Gobierno” (%)
Fuente: Latinobarómetro
En este gráfico, el primer punto que se puede observar es que ocurre un patrón de oscilación entre más o menos confianza en el gobierno a lo largo del tiempo. Sin embargo, es fundamental señalar el índice de “Poca o Ninguna Confianza” es bastante alto, variando, generalmente, alrededor de 55% y 65%. A partir de eso, es posible constatar que, nuevamente hay una preponderancia del indicador negativo. El próximo gráfico sigue en esa misma línea, demostrando la confianza de la población en las instituciones políticas, en este caso, el congreso.
Gráfico 5: “Confianza en el Congreso” (%)
Fuente: Latinobarómetro
De modo general, los índices de desconfianza son altos, nuevamente. La categoría negativa “Poca o Ninguna confianza” varía alrededor de 70%, más de dos tercios de los entrevistados. Se presenta, así, también en el ámbito de la representación en el legislativo, una gran descreencia, preocupante para la legitimidad democrática en lo que concierne al respaldo de los ciudadanos junto a las instituciones políticas del país.
Consideraciones finales
De modo general, la revisión bibliográfica aqui verificada señala que en Brasil, la toma de decisiones es dada de forma más centralizada y lejana, con actores políticos débiles en lo que se refiere a su legitimidad ante la población, haciendo que los ciudadanos se mantengan desconfiados en lo que concierne al proceso político. En consonancia con eso, los datos presentados apuntan para una dificultad bastante grande por parte de las instituciones democráticas para ponerse como entidades representativas, confiables y eficientes ante la población.
De este modo, el escenario es todavía bastante negativo, las tendencias encontradas en las variables examinadas demuestran que, de manera general, aún existen barreras para la legitimidad y adhesión al régimen democrático por parte de los brasileños, reflejadas en desconfianza sobre las instituciones, en insatisfacción con el funcionamiento del régimen en la práctica y también en la apropiación de los benefícios decisorios para una minoría privilegiada. Sin embargo, es importante subrayar que casi todas las cuestiones analizadas en este artículo presentan una retrospectiva más positiva en los años más recientes y contrastan con la manutención de una opinión genérica positiva sobre la democracia.
Bibliografía:
Dahl, Robert. 1997. Poliarquia: participação e oposição. São Paulo: EDUSP.
Faoro, Raymundo. 2001. Os donos do poder. Formação do Patronato Político Brasileiro. Rio de Janeiro: Globo.
Holanda, Sérgio Buarque de. 2007. Raízes do Brasil. 26° ed. São Paulo: Companhia das Letras.
Moisés, José Álvaro. 1995. Os Brasileiros e a Democracia: Bases Sócio – Políticas da Legitimidade Democrática. São Paulo: Ática.
Autor: Bruno Mello Souza y Jessica Duarte
Fuente: http://bit.ly/1cQ4nbP